La cantante estadounidense Katy Perry ha puesto su granito de arena a una noche llena de sentimientos en una gala benéfica que se realizó en el Beacon Theatre de Nueva York en favor de los niños autistas y en la cual cantó una canción a duó con una niña autista.
"Night Of Too Many Stars: America Comes Together For Autism Programs", es una gala benéfica en el que han participado numerosos rostros conocidos estadounidenses para apoyar a la gente que tiene autismo, sobretodo apoyar la educación de los niños autistas, que ha sido organizada por el canal Comedy Central y que se retransmitirá el 21 de octubre por el mismo canal de televisión.
Entre los rostros conocidos de la gala benéfica brilló una estrella más que todas las demás, la cantante Katy Perry. O más bien deberíamos decir que brillaron dos estrellas. Una fue la cantante, pero la principal protagonista de esa noche fue una niña autista, Jodi DiPiazza, con la que interpretó "Fireworks".
La historia de Jodi es muy peculiar y muy positiva. Todas lo son, pero esta vez fue su historia, la historia de Jodi, la que se representó en la pantalla grande del Beacon Theatre. La niña sufre autismo pero que desde que se le diagnosticó hasta el día de hoy ha tenido un progreso positivo impresionante.
En el video, sus padres comentan: "(Jodi) fue diagnosticada justo antes de su segundo cumpleaños. Nos dijeron que no había cura y que no esperáramos mucho. Todos los sueños que teníamos para ella, se desvanecieron de repente.". Los padres no han dejado de luchar, y gracias a esa lucha han conseguido ciertos objetivos que en un comienzo no esperaban que ocurrieran: "Teníamos miedo de que nunca llegara a hablar; ni siquiera soñábamos que ella llegaría a cantar o fuera capaz de entender. Mientras la educación ha continuado, he desistido de la idea de que (Jodi) tiene limitaciones, pues continuamente ha demostrado que no es cierto".
Ambas en el escenario, Jodi y Katy Perry, interpretaron "Fireworks". Por un lado la voz de la cantante californiana y por el otro Jodi, quien cantó y, además, tocó el piano impresionando a todos con su calma y su talento mientras interpretaba una versión acústica de la exitosa canción.
Tan emocionante fue la presentación y el breve concierto que hicieron ambas sobre el escenario que más de la mitad de los que estaban ahí presentes acabaron soltando más de una lágrima. Al acabar la canción todo el mundo se puso en pie y comenzaron a aplaudir con todas sus fuerzas dedicando una gran ovación a esta joven estrella que se abrazaba a una emocionadísima Katy Perry.
Katy Perry, aún emocionada por lo que había vivido en la gala, publicó en su cuenta de Twitter: "Nunca olvidaré lo de anoche. Fue el momento más importante hasta ahora de lo que hago.".
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